Washington, 25 feb (EFE).- El secretario de Relaciones Exteriores de Honduras, Enrique Reina, rechazó este viernes que se violaran los derechos del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández durante su arresto y subrayó que fue capturado bajo el procedimiento que él mismo había establecido cuando estaba en el poder.

«Se le dio la oportunidad de entregarse, los derechos le fueron respetados; el procedimiento es el mismo que había fijado el mismo Juan Orlando Hernández para este tipo de situaciones», reivindicó el canciller hondureño en entrevista con Efe en la Embajada de Honduras en Washington.

Reina viajó esta semana a Estados Unidos para estrechar la colaboración con ese país en materia migratoria, económica y de combate a la corrupción y al narcotráfico tal y como acordaron la nueva presidenta hondureña, Xiomara Castro, y la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, en un encuentro el 27 de enero.

Esta nueva etapa se escenificó el pasado 14 de febrero con la detención de Hernández (2014-2017), quien pocos días después de dejar el poder fue capturado y esposado de manos y pies en su casa por una solicitud de extradición de Estados Unidos por narcotráfico.

Ante las críticas por la dureza del arresto, el canciller hondureño sostuvo que «no se violentó ningún derecho» del expresidente, subrayó que se le ha permitido la visita de familiares y recordó que el mismo Hernández modificó la Constitución para permitir la extradición de hondureños.

Además, recordó que está acusado de delitos «muy graves» y que en otros países este tipo de acusados también «van asegurados».

Sobre el caso, Reina consideró «penoso» que Hernández haya sido procesado por las autoridades judiciales de Estados Unidos en lugar de las hondureñas, y sentenció que eso «debe hacer reflexionar mucho» sobre la necesidad de mejorar el sistema de Justicia en Honduras.

«Obviamente deberían ser las instituciones hondureñas las responsables de investigar si hay crímenes de funcionarios, investigar si hay delitos ligados al narcotráfico y la corrupción», expresó.

Para el canciller la corrupción en anteriores Administraciones es también responsable de la crisis migratoria en la región, ya que calcula que se desviaron 6.000 millones de dólares de fondos públicos que podrían haber servido para mejorar el bienestar de los hondureños.

Por ello busca con Estados Unidos atender las causas de la migración forzada, como la falta de oportunidades y de empleos, afirmó.

Por eltiempo